Hay una dulce tradición catalana para la festividad de Todos los Santos: los panellets.
Son dulces típicos de la tradición catalana, que tu también puedes preparar en casa, pues son un símbolo de alegría y gratitud en la solemnidad de Todos los Santos, recordándonos la dulzura de la vida eterna que los santos gozan en el Cielo
Estos bocados de almendra molida, azúcar y piñones, envueltos en humildad y sabor, invitan a la familia a celebrar la comunión de los santos con un gesto sencillo y devoto.
Prepararlos en casa es un acto de piedad que une las manos en la cocina y los corazones en oración, ofreciendo cada bolita como una ofrenda a Dios. A continuación, una receta básica para panellets de piñones, adaptable para cualquier momento de devoción.
Ingredientes necesarios (para 30-40 panellets)
- 500 g de almendra molida (o marzipán natural).
- 400 g de azúcar glas (o azúcar fina).
- 2 claras de huevo grandes.
- 150 g de piñones (para cubrir).
- Opcional: coco rallado, chocolate en polvo o almendras fileteadas para variantes.
- Una bandeja con papel de horno.
- Una manga pastelera o cucharita (para formar bolitas).
Paso a paso para preparar panellets
- Mezcla los ingredientes secos: En un bol grande, combina la almendra molida con el azúcar glas, removiendo hasta obtener una textura uniforme. Reza un Ave María mientras preparas, pidiendo a la Virgen María que bendiga esta ofrenda dulce, como ella bendijo la vida de los santos.
- Incorpora las claras: Añade las claras de huevo batidas ligeramente (no a punto de nieve) a la mezcla. Amasa con las manos hasta formar una pasta suave y maleable, que no se pegue demasiado. Si está muy seca, añade una clara extra; si está húmeda, un poco más de almendra. Reflexiona sobre la humildad de los santos, cuya grandeza radicaba en actos pequeños y confiados.
- Forma las bolitas: Toma porciones de la pasta del tamaño de una nuez y forma bolitas compactas. Humedece ligeramente las manos para facilitar el proceso. Coloca los piñones en un plato y presiona cada bolita en ellos para cubrirla uniformemente. Si prefieres variantes, rebózalas en coco o chocolate.
- Hornea con cuidado: Precalienta el horno a 180 °C. Coloca las bolitas en la bandeja con papel de horno, dejando espacio entre ellas. Hornea durante 8-10 minutos, hasta que los piñones se tuesten ligeramente, pero sin que se doren demasiado (los panellets deben quedar suaves por dentro). Deja enfriar completamente en una rejilla.
- Presentalos como ofrenda: Coloca los panellets en un plato junto al altar hogareño, cerca de imágenes de santos queridos o la Virgen María. Luego compartelos en familia, explicando su simbolismo como un recordatorio de la “dulzura celestial” que nos espera.
Significado de esta tradición
Los panellets, originarios de Cataluña y arraigados en la piedad popular católica, se preparan para Todos los Santos como un gesto de alegría por la victoria de los santos sobre la muerte.
La sencillez de estos dulces —almendra y azúcar en forma humilde— evoca la doctrina de la comunión de los santos, donde lo pequeño se eleva en la gracia de Dios.
Esta costumbre, transmitida de generación en generación, une la mesa familiar con la Iglesia triunfante, fomentando la oración y la gratitud.
Sugerencia espiritual
Preparar panellets es una oportunidad para meditar en familia sobre las vidas de los santos, eligiendo uno para cada variante del dulce.
Durante la solemnidad de Todos los Santos, ofrece los panellets por las almas del Purgatorio, rezando un rosario.
Enseña a los niños que estos dulces representan la “semilla de santidad” que Dios planta en cada uno, animándolos a participar en la masa para que la fe se forme en sus manos.
Los panellets caseros son un dulce testimonio de fe, uniendo tradición y devoción en un bocado de esperanza. Que los santos, con su ejemplo luminoso, nos guíen hacia la eternidad, bajo el manto de la Virgen María.
